Salud en Casa.- Por lo general, el cáncer rectal afecta a las personas en una etapa más avanzada de sus vidas; sin embargo, los médicos están notando una tendencia desconcertante de cáncer rectal en pacientes más jóvenes.
La edad promedio de diagnóstico ha disminuido de 67 a 63 años. Además, un número creciente de personas jóvenes entre 30 y 40 años están siendo diagnosticados con cáncer rectal.
El doctor Steven D. Wexner, jefe del Departamento cirugía colorrectal de Cleveland Clinic Florida y jefe del Programa Nacional de Acreditación para cáncer rectal, explica que existen algunas posibles razones, pero en la actualidad no hay una respuesta definitiva.
“La teoría es que el cáncer rectal proviene de una acumulación de mutaciones que pueden volverse cancerosas con el paso del tiempo; por lo tanto creemos que el riesgo de cáncer aumenta con el tiempo” comentó el especialista.
El aumento de la incidencia en pacientes más jóvenes no se debe al chequeo médico, ya que el Colegio Americano de Gastroenterología recomienda una primera colonoscopia a los 50 años. Se sabe que las personas más jóvenes con factores de riesgo genético, enfermedad intestinal inflamatoria o colitis ulcerativa, tienen mayores posibilidades de padecer esta enfermedad. Sin embargo, en las estadísticas no se han incluido los grupos de mayor riesgo, así que estos no contribuyen con esta nueva tendencia de cáncer rectal en personas más jóvenes.
La preocupación es el creciente número de adultos de mediana edad con cáncer rectal que no presentan estos factores de riesgo.
“Lamentablemente, los pacientes más jóvenes y sus médicos pasan por alto los síntomas debido a la edad, pero es importante considerar realizarse un chequeo acompañado de una colonoscopia si existe un cambio en los hábitos intestinales como dolor abdominal o sangrado rectal”, abundó el Dr Wexner.
Pronóstico
Cuanto más temprano se diagnostique, mejor. En etapas 1 o 2, si el cáncer se limita a la pared del intestino y no se ha extendido a los ganglios linfáticos, más del 90% de los pacientes pueden curarse. Si avanza a la etapa 3, el cáncer se ha extendido a los ganglios linfáticos y la tasa de curación disminuye a un 67%. En etapa 4, el cáncer se ha extendido al hígado o los pulmones; únicamente el 10% de estas personas continúan vivos en un periodo de cinco años.