Salud en Casa.- Cuando duele el estómago, lo primero que mucha gente se puede preguntar es si habrá comido algún alimento que le “cayó mal”. Sin embargo, el dolor de estómago puede tener diversas causas, incluso algunas escapan a las gástricas directamente, y pueden alertar sobre la existencia de alguna patología, que amerite la visita a un especialista.
Para saber qué origina el dolor de estómago, es importante determinar si se trata de un malestar recurrente o un síntoma poco común. El Dr. Héctor Velarde, médico gastroenterólogo, explica que la intensidad del dolor, su ubicación, el horario en que se presenta y la presencia de otras molestias asociadas, como vómitos, diarrea, dolor de cabeza, entre otros, permite determinar qué condición presenta el paciente y cuál es el tratamiento más idóneo.
En esta línea, el Dr. Velarde indica que el dolor de estómago puede ser desencadenado por problemas digestivos, como gastritis, úlceras, cálculos vesiculares, enfermedades inflamatorias, etc. Sin embargo, dicho dolor puede ser también síntoma de una enfermedad funcional, que son aquellas en las cuales no se encuentra una lesión orgánica y generalmente son desencadenadas por estrés u otros factores.
Por lo general, los antiespasmódicos son la mejor opción para el alivio inmediato del dolor abdominal, debido a que actúan directamente sobre los calambres abdominales que los origina. No obstante, el especialista indica que el médico que examine al paciente podrá indicar el mejor tratamiento para aliviar el dolor.
Para determinar si el dolor de estómago está alertando acerca de la existencia de alguna enfermedad funcional de mayor cuidado, el especialista señala a continuación los síntomas más frecuentes:
· Cálculos en la vesícula. El dolor se ubica en la zona superior derecha o zona media del abdomen; se puede irradiar hacia la espalda y suele ir acompañado de náuseas y vómitos.
· Trastorno digestivo funcional o “colon irritable”. Normalmente viene acompañado de gripe o diarrea y se relaciona con la alimentación y el estado de ánimo.
· Apendicitis. La persona puede sentir un dolor repentino bajo el estómago, en el lado derecho, el cual se intensifica con el pasar de las horas. Otros síntomas incluyen vómitos, falta de apetito, fiebre moderada y, en ocasiones, dificultad para desplazarse debido al dolor.
Evitar alimentos cítricos, altos en grasas o con exceso de condimentos, bebidas gaseosas o altas en cafeína, tabaco y alcohol, permitirá mejorar la salud digestiva. “Una alimentación saludable, ejercicio físico y beber abundante agua es de vital importancia para mantener sano nuestro estómago. Además, se debe acudir al especialista para hacerse los chequeos necesarios y no solo cuando se presente malestar”, finalizó Velarde.