Salud en Casa.- Conforme pasan los años, diversas partes de nuestro cuerpo se deterioran, siendo las rodillas de las más comunes, las cuales pueden sufrir un proceso de desgaste. El dolor en esta parte del cuerpo es recurrente en las personas mayores, aunque los más jóvenes también los acusan.
Las articulaciones son afectadas, en la mayoría de los casos, por la artrosis, una dolencia producida por el desgaste del cartílago. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor del 28% de la población mundial mayor de 60 años la padece y, además, para cerca del 80% supone una limitación de su capacidad motora (1).
Debido a estos problemas, el Dr. Julio Iberico, médico traumatólogo, comparte algunas recomendaciones para prevenir estas afecciones:
· Mueve las articulaciones: El sedentarismo es el peor enemigo del dolor articular, mientras que el ejercicio mejora el tono muscular. Incluso si hay dolor, la mejor solución es el deporte, pero se debe consultar al médico para indicar que ejercicios son los adecuados. En general se recomienda practicar deportes sin sobrecargas.
· Mantener un peso adecuado: El sobrepeso aumenta considerablemente el riesgo de sufrir lesiones en las articulaciones, sobre todo en las rodillas. Mantener un peso dentro de rangos normales permite que las articulaciones que soportan el peso no sufran presión excesiva.
· Un buen masaje: En manos de expertos, pueden ser de gran ayuda. El masaje aumenta la circulación en la zona afectada y favoreciendo las condiciones para reducir la fricción entre huesos y cartílagos y lubricando las articulaciones.
Al respecto, el Dr. Iberico aconseja asistir al médico especialista para que pueda ayudar a prevenir o tratar los casos de dolencias en articulaciones. “Es importante asistir al médico antes de hacer deporte. El mejor ejercicio para personas mayores de 60 años es caminar en lugares planos, bien iluminados durante 30 a 40 minutos”, indica.
Así mismo, aconseja seguir un tratamiento suplementado con péptidos de colágeno bioactivos, producidos bajo altos estándares de calidad y asimilados por el cuerpo para favorecer la salud de las articulaciones.