Salud en Casa.- La higiene del sueño es un pilar fundamental para la recuperación de pacientes, pues dormir bien no solo beneficia la salud en general, sino que también es clave en procesos de sanación. Las horas de sueño permiten la restauración física y mental, la reparación de tejidos, el fortalecimiento del sistema inmunológico y la reducción de estrés y ansiedad. En ese sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) respalda la importancia del sueño para la prevención de enfermedades crónicas, señalando que la falta de sueño aumenta el riesgo de problemas de salud a largo plazo.
“Para una recuperación efectiva, la cantidad de horas de sueño recomendadas puede variar según la edad y el estado de salud de cada persona. Los adultos, por ejemplo, necesitan entre 7 y 9 horas de sueño diarias, mientras que quienes padecen enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión o ansiedad necesitan un sueño regular de entre 7 y 8 horas para evitar empeorar sus síntomas. Es importante adaptar las prácticas del descanso a las necesidades específicas de cada paciente y reducir factores que puedan interrumpirlo”, afirma Nadezhda Cochachi, docente de la carrera de Enfermería del Instituto Carrión.
La especialista nos brinda algunas recomendaciones para mejorar la higiene del sueño y, por ende, acelerar la recuperación y ayudarnos a mantener una vida más sana.
“La higiene del sueño es esencial en la recuperación de cualquier paciente, debido a que un descanso adecuado fortalece el sistema inmunológico y reduce la inflamación y el dolor. Incorporar hábitos y rutinas saludables en el sueño puede hacer una diferencia significativa en el bienestar, ayudando a los pacientes a recuperarse en menos tiempo y con mayor calidad de vida", explica la especialista del Instituto Carrión.