Salud en Casa.- Cada 16 de octubre se celebra el Día Mundial de la Alimentación con el objetivo de sensibilizar a las personas sobre la importancia de gestionar adecuadamente los recursos alimenticios para combatir el hambre, la desnutrición, así como la pobreza. En ese sentido, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), declaró la promoción del derecho a los alimentos como el tema central para este año.
En la actualidad, uno de los principales desafíos es el acceso a una dieta adecuada. Según la FAO, en Perú, 17.6 millones de personas viven en inseguridad alimentaria moderada a severa. Por otro lado, de acuerdo con la última Encuesta Nacional de Demografía y Salud (ENDES), los niveles de anemia en menores de entre 6 y 35 meses de edad supera el 40%, poniendo en riesgo su crecimiento.
Conscientes de la importancia de impulsar la nutrición, en el país se han implementado programas como ‘Anemia Cero’, en el que participan diversas empresas e instituciones, entre ellas Redondos, quienes, además, a través de ‘Somos + Hierro’, propician el cuidado y desarrollo tanto de los hijos de sus colaboradores como de niños de entre 6 meses y 17 años de comunidades vulnerables, reduciendo la prevalencia de la anemia con intervenciones efectivas.
Esto, sumado a otras iniciativas estratégicas, les permite a estas organizaciones mejorar la calidad de vida de las personas a través del acceso a insumos ricos en nutrientes, indispensables para potenciar su desarrollo.
Gracias a ello, múltiples familias pueden seguir compartiendo de momentos importantes con sus seres queridos y encontrar el impulso para seguir ‘poniéndole el pecho’ no solo a su plato, sino a todo lo que hagan; a llenar sus vidas de encuentros que los enriquezcan para implementar rutinas saludables tanto en su vida cotidiana como en su alimentación.
A continuación, encuentra cuatro tipos de alimentos que potencian la salud, aumentan la energía, a la vez que les permiten a las personas comer bien y vivir mejor:
La conmemoración de esta fecha resalta el valor de trabajar en conjunto para enfrentar el desafío de la inseguridad alimentaria a nivel global. Promover sistemas sostenibles y combatir la desigualdad, asegurando el acceso a productos de calidad, es clave para construir un futuro en el que el acceso a alimentos sea un derecho fundamental para todos.