Beneficios del tratamiento con hilos tensores

24 Junio, 2024

Salud en Casa.- Los hilos tensores se aplican en las zonas faciales como mejillas y cuello mediante el uso de finas agujas que trazan diferentes patrones en la dermis y tejido subcutáneo.

 

 

 

Los hilos tensores son un procedimiento de rejuvenecimiento facial no quirúrgico que ha ganado notable popularidad en los últimos años. Este tratamiento innovador utiliza hilos de material biocompatible insertados debajo de la piel para levantar y reafirmar áreas específicas del rostro, logrando resultados naturales y duraderos.

 

 

 

La doctora Giulianna Berrocal, especialista del Centro de Medicina Estética de la Clínica Ricardo Palma, explica que existen opciones de hilos como hilos tensores estipulados y los hilos mono, conocidos como hilos lisos. Estos tratamientos se pueden aplicar en zonas faciales como mejillas y cuello mediante el uso de finas agujas que trazan diferentes patrones en la dermis y tejido subcutáneo, aumentando la elasticidad y tensión de las áreas tratadas.

 

 

 

Los hilos tensores espiculados, una alternativa efectiva contra el envejecimiento y la flacidez facial, tienen un diseño especial con espículas que permite anclar el tejido y reposicionarlo, generando un notable efecto lifting. Además, entre los beneficios clave se encuentran tensar la piel, combatir la flacidez facial, reafirmar y demarcar el ángulo del rostro, y estimular la producción de colágeno.

 

 

 

Los hilos mono o lisos, una solución para la flacidez leve, están hechos de PDO (polidioxanona) y se insertan en la piel en un patrón de malla para lograr efectos de ajuste y bioestimulación. Entre los beneficios se encuentran: redensificar el tejido para mayor fortaleza, tensar pieles delgadas, reducir grasa en áreas del rostro como papada y pómulos, y estimular la producción de colágeno.

 

 

 

Una vez colocados y asimilados por el organismo, comienzan a mostrar resultados en aproximadamente 30 a 45 días. Asimismo, la duración dentro del rostro es de 12 a 18 meses. Luego de la aplicación se recomienda utilizar compresas frías para reducir la hinchazón y evitar actividades extenuantes.

 

 

 

Es importante destacar que se requiere de una evaluación médica previa para determinar si el paciente es apto para el procedimiento, además de seguir todas las instrucciones de cuidado postoperatorio para obtener resultados óptimos.