Salud en Casa.- El cáncer colorrectal es una enfermedad que se origina cuando las células sanas de las paredes internas del colon o del recto cambian y comienzan a crecer sin control, dando origen a pequeños tumores denominados pólipos. Si bien esta enfermedad afecta principalmente a personas mayores, hace algunos años atrás se ha visto que está más presente en los jóvenes.
En el Perú, la prevalencia de esta patología es de 11.4 x 100.000 habitantes; es decir, cada año se registran 4.636 nuevos casos y 2.635 fallecimientos, según el último reporte 2020 del Observatorio Global del Cáncer (Globocan). Por ello, el cáncer colorrectal es el quinto de mayor incidencia en el país.
La Dra. Macarena Larraín, gastroenteróloga del Instituto Oncológico FALP, explica que la obesidad, el consumo de alimentos procesados y de carnes rojas, el sedentarismo, la ingesta excesiva de alcohol y el tabaquismo, son algunos factores que influyen en el desarrollo del cáncer colorrectal, enfermedad que se origina a partir de pólipos en el intestino grueso. “La mayoría de estos bultos son benignos, pero, si no se tratan, algunos pueden crecer y desarrollar cáncer; por ello, es mejor extirparlos para reducir el riesgo de que se transformen en cáncer", agrega la especialista.
En personas con riesgo asociado a mutaciones genéticas heredadas que causan poliposis adenomatosa familiar o síndrome de Lynch, se recomienda practicar una colonoscopía antes de los 20 años. Además, quienes cuentan con antecedentes familiares directos de cáncer de colon, deben adelantar la realización de una colonoscopía a los 40 años, o hacérsela 10 años antes de la edad en que se le diagnosticó a ese familiar.
Para un diagnóstico oportuno, se recomienda realizar el test de hemorragias ocultas en deposiciones, que permite efectuar la búsqueda de la presencia de sangre en las heces y alertar si hay un posible caso de cáncer. Otra de las pruebas que se recomiendan es la colonoscopía, procedimiento que se realiza con un colonoscopio, para examinar el colon (intestino grueso) y el recto en búsqueda de pólipos, los que se extraen durante el mismo procedimiento para ser analizados.
“Es fundamental concientizar a las personas para que se hagan los exámenes para diagnosticar de manera temprana esta enfermedad o lesiones que incluso son previas al cáncer. Esta no solo mejora las tasas de supervivencia, sino que también reduce la necesidad de tratamientos invasivos”, destaca Larrain.
Detección de síntomas:
Los cambios constantes en la frecuencia, forma, color o consistencia de las heces pueden alertar problemas digestivos importantes. Por ejemplo, las heces negras pueden indicar sangrado gastrointestinal superior, por ej. en el estómago, y presencia de un tumor. En el caso de heces con manchas rojas o sangre, estas pueden indicar sangrado digestivo inferior en el intestino grueso o el recto, por hemorroides o presencia de un tumor.ç
Otros de los síntomas que se pueden presentar se encuentra en la sensación de evacuación intestinal incompleta, cambio en el ritmo intestinal, deposiciones delgadas, pérdida de peso inexplicable, dolor abdominal y debilidad y fatiga.
Precisamente, con la finalidad de generar conciencia, FALP, realizará el Conversatorio Virtual sobre Cáncer Colorrectal este 14 de marzo a las 2:00 p.m. Para poder participar pueden registrarse en el siguiente link.