Salud en Casa.- La incontinencia urinaria es una condición que afecta a millones de personas en todo el mundo, independientemente de su edad o género. Según la Asociación Urológica Americana, se estima que entre un cuarto y un tercio de los hombres y mujeres en los EE. UU. sufren de incontinencia urinaria, impactando no solo en el bienestar físico, sino también en la salud mental.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de Estados Unidos (NIDDK, por sus siglas en inglés), los problemas de la vejiga sin tratar pueden alterar el estilo de vida. Un ejemplo de ello es que la persona tenga que evitar actividades que alguna vez disfrutó, porque no quiere tener que ir al baño en medio de estas o sufrir un accidente.
Para la psicóloga Kristell Pacheco, esta condición puede conllevar a sentimientos de vergüenza, aislamiento social, estrés y/o ansiedad, afectando profundamente la calidad de vida de quienes la padecen. “Si bien la incontinencia urinaria se ha abordado principalmente desde una perspectiva médica, es crucial reconocer la interconexión directa entre esta condición y la salud mental de los individuos que la experimentan”, señala.
Reconocer y abordar la conexión entre la salud mental y la incontinencia urinaria es fundamental para proporcionar un cuidado integral de las personas. Con ello en cuenta, la especialista en psicología junto a Cotidian -marca especializada en incontinencia urinaria- brinda 5 recomendaciones para ayudar a mitigar el impacto en la salud mental de quienes enfrentan esta condición:
“Al implementar estrategias psicológicas, promovemos no sólo la aceptación y el manejo efectivo de la condición, sino también el fortalecimiento de la resiliencia emocional. Es esencial trabajar conjuntamente estas variables para eliminar el estigma y fomentar la comprensión, construyendo un camino hacia la mejora del bienestar integral de aquellos que enfrentan la incontinencia”, comenta Verónica Jane, brand manager de Cotidian.