DIARIO GESTIÓN.- La articulación de diversos actores de los sectores público y privado es fundamental para avanzar en la reducción de la anemia en el Perú, sostuvo Tania Goossens, directora del Programa Mundial de Alimentos de la ONU.
Desde CADE 2018, Goossens comentó que si bien la meta del gobierno de disminuir la anemia de 43% a 19% hacia el 2021 es ambiciosa, hay aspectos positivos que hacen viable alcanzar dicho objetivo.
En primer lugar, dijo que ya se cuenta con un plan multisectorial en el país en la lucha contra la mencionada enfermedad. "La anemia no es solamente un asunto de salud, creo que ese plan es un reconocimiento que de verdad es el papel de muchos actores. El plan tiene 15 ministerios e involucra a otros actores", dijo Goossens a RPP en una entrevista desde Paracas, donde se realiza el foro empresarial.
También señaló que ya se tiene identificado un modelo para realizar intervenciones en zonas del país donde hay anemia. "Lo importante es ampliar esas intervenciones a otras regiones, y las regiones con más prioridad", indicó.
A modo diagnóstico, Goossens precisó que el 50% de la causa de anemia en el país es por el déficit de hierro, por lo que es importante que entidades como el Ministerio de Agricultura tenga un rol activo para garantizar la disponibilidad y el acceso a los alimentos.
El 50% restante de la causa de la enfermedad obedece a la falta de acceso al agua, saneamiento e higiene. "Hay tareas pendientes en infraestructura, acceso al agua limpia e higiene, entonces otra vez hay muchos actores que pueden contribuir con el objetivo de mejorar todo esto", dijo.
Programas de la ONU
Goossens explicó que la ONU ya llevó a cabo programas de lucha contra la anemia en Ventanilla (Lima) y Sechura (Piura). Dijo que el éxito de dichas iniciativas fue la participación del sector salud, la empresa privada, municipios y las propias comunidades.
"Creo que ahí está el éxito. La asociación entre los diferentes socios y el acompañamiento a las familias. Todo esto es muy esencial", acotó.
En esa línea, Goossens señaló que el sector privado cada vez es más consciente del problema de la anemia en el Perú, por lo que el gobierno puede trabajar más de cerca con las empresas.
"Hay que trabajar con ellos para definir sus intervenciones en sus programas sociales o los proyectos de obras por impuestos para asegurar que haya más inversión en salud y nutrición", concluyó.