Salud en Casa.- Una buena alimentación es importante para lograr una piel sana y joven, pues lo que elijamos ingerir nos aportará vitaminas, minerales y proteínas necesarios no solo para mantenerla sino incluso para manejar afecciones como el acné y la rosácea, así como prevenir su envejecimiento.
“Una dieta rica en azúcares y alimentos ultraprocesados puede empeorar el acné al aumentar la producción de sebo y la inflamación en la piel. Además, el consumo de alcohol puede deshidratarnos, lo que puede exacerbar afecciones como el acné y la rosácea. En el caso de los alimentos picantes, éstos pueden agravar la rosácea y causar enrojecimiento facial”, señaló la Lic. María Paz Vásquez, nutricionista del Centro de Medicina Estética de la Clínica Ricardo Palma.
La experta recomienda consumir una alimentación basada en vitaminas esenciales como la A, C y E, que pueden obtenerse de las frutas, verduras, frutos secos, semillas y aceites vegetales como el de oliva. Resaltó que la vitamina C es un antioxidante clave para la síntesis del colágeno y mantiene la piel firme y elástica. La vitamina D, que se obtiene de la exposición al sol moderada y suplementos, posee propiedades antiinflamatorias y puede ayudar a reducir la inflamación en la piel.
Hoy en día, el estrés es también considerado un factor que puede afectar la piel. Para prevenirlo, se recomienda practicar actividades como el yoga, la meditación y realizar ejercicio de modo regular. Estas actividades pueden mejorar la sensación general de bienestar y felicidad. Para complementar los cuidados a nuestro rostro, también es recomendable una limpieza facial profunda que ayudará a mantenerlo limpio, exfoliado, hidratado, mejorando así su textura y elasticidad, eliminando células muertas y toxinas.
En suma, mantener una piel saludable es un proceso que involucra tanto una alimentación adecuada, la práctica de ciertas actividades y aplicación de determinados tratamientos, así como mantener una hidratación adecuada. Por ello, la especialista brinda a continuación algunas recomendaciones para mantener una rutina diaria para el cuidado de la piel y cuerpo en general:
· Hidratación matutina: Comienza tu día bebiendo un vaso con agua para rehidratar tu cuerpo después del ayuno nocturno. La hidratación es esencial para mantener la piel suave y radiante.
· Desayuno equilibrado: Consume un desayuno saludable que incluya alimentos ricos en antioxidantes, como frutas y vegetales.
· Protección solar: Si planeas estar al aire libre, es importante aplicarse un protector solar con un factor de protección adecuado para proteger tu piel.
· Hidratación constante: Bebe agua a lo largo del día para mantener la piel hidratada.
· Snacks saludables: Si tienes hambre entre comidas, opta por snacks saludables como frutos secos, frutas o yogurt griego para mantener una alimentación adecuada, variada y obtener diferentes nutrientes.
· Poner límites: Disminuye el consumo de azúcar y los alimentos ultraprocesados, además la ingesta de alcohol y tabaco que son perjudiciales para nuestra piel.