Salud en Casa.- Según cifras de la Sociedad Peruana de Cardiología (SOPECARD), el Perú registra más de 100 infartos agudos al miocardio al día, uno de los males más prevalentes en el país que requiere de una atención inmediata para evitar las consecuencias, como el deterioro del corazón o incluso la muerte. De acuerdo con el Dr. José Drago, presidente de dicha sociedad científica, esta condición es más frecuente a partir de los 40 y 50 años, con mayor prevalencia en varones, quienes corren el riesgo de no identificar a tiempo este mal.
El especialista recuerda a la población que el infarto es una de las emergencias médicas más frecuentes en el país, ya que una tercera parte de los pacientes que presentan este mal, fallecen en sus hogares o en camino a atenderse porque no lo reconocen a tiempo. “Lo recomendable es que el paciente llegue al centro de atención en las primeras cuatro horas. Una vez el personal médico diagnostique el infarto, este debe ser atendido en menos de una o dos horas para que pueda restablecerse eficazmente”, recalca.
El vocero informa que el infarto agudo al miocardio suele presentarse en personas que poseen factores de riesgo, como antecedentes familiares, edad avanzada, enfermedades o condiciones previas, como hipertensión, diabetes o el tabaquismo. Además, indica que la gravedad del infarto depende de la severidad de la enfermedad y factores hereditarios. Igualmente resalta que, si el paciente tiene como antecedente un primer infarto, el riesgo de tener otro es mucho más alto, ya que la mayoría de las personas no suelen adoptar correctamente las indicaciones de su médico.
“La primera experiencia de infarto generar mayor conciencia en los pacientes, quienes tienden a cuidarse más. Sin embargo, a la fecha, entre el 20 o 40% de las personas que padecieron alguna emergencia cardiológica, abandona su tratamiento, lo que pone en riesgo su salud. Por eso, es prioritario que quienes han sido diagnosticados con estos males, cumplan al pie de la letra con el procedimiento que su médico les ha prescrito”, recomienda el especialista.
Atención a otras complicaciones cardiovasculares
El Dr. Drago exhorta a la población a no bajar la guardia en la prevención de las enfermedades cardíacas, pues existen otras enfermedades con gran incidencia, las cuales se asocian con el envejecimiento, sin embargo, son desencadenadas por otros factores. “Algunas de las consecuencias de la pandemia fue el descuido de la salud de otras áreas, como la cardiovascular y, en segundo lugar, la manera en cómo quedó comprometido el corazón a raíz de los pacientes que sufrieron Covid-19, sobre todo, en un nivel severo”.
Según estimaciones de la SOPECARD, 1 de 4 adultos en el Perú padece de hipertensión arterial, la cual se diagnostica cuando la presión arterial está elevada. “Es una condición que aumenta el riesgo de muerte por enfermedades cardiovasculares; por ello, debe ser tratada por varios especialistas. Lo ideal es mantener un control adecuado. Otra enfermedad muy prevalente en el país es la fibrilación auricular, un tipo de arritmia crónica de alto riesgo que dificulta el funcionamiento del corazón y puede producir embolias, y posteriormente, un infarto cerebral”, advierte.
Importancia de la prevención y tratamiento integral
El presidente de la Sociedad científica refuerza la importancia del chequeo preventivo oportuno para la detección precoz de enfermedades asociadas al corazón y de factores de riesgo que las desencadenen. “Se recomienda que la visita a los especialistas en cardiología inicie cuando una persona empieza su vida laboral. Los análisis básicos son la glucosa, el colesterol y un buen examen físico. Con esas medidas tan sencillas, podemos hacer una adecuada prevención cardiovascular, ya que emergencias como un infarto se pueden dar en cualquier momento”, aconseja a la población.
Por otro lado, el galeno explica que el tratamiento de enfermedades cardiovasculares tiene dos aspectos. El primero, el procedimiento con medicación que es fundamental porque prolonga la vida; sin embargo, hay casos en los que es necesario aplicar tecnología, que ofrece tratamientos mínimamente invasivos.
“Hay una serie de intervenciones que se realizan gracias a los avances científicos para mejorar la salud de los pacientes, que antes estaban condenados a fallecer rápidamente. Hoy, con dispositivos médicos innovadores se puede restablecer la calidad de vida de los pacientes. Por ejemplo, un paciente que padece de un infarto con bloqueo cardíaco severo es candidato a un marcapasos, algunos de los cuales tienen funciones especializadas. Igualmente, existen procedimientos menos invasivos que contrarrestan las complicaciones y reducen el tiempo de recuperación posoperatorio”, agrega el experto.
Sin embargo, el Dr. Drago indica que la atención de las emergencias cardiológicas aún presenta grandes desafíos. “Por ejemplo, es necesario descentralizar la atención y contar con centros implementados con tecnología de punta para atender a los pacientes como estos lo requieren. Necesitamos tener acceso a herramientas, tecnología, infraestructura y personal capacitado para el cuidado idóneo de un infarto, como se recomienda en todos los lineamientos mundiales”, recalca el médico.
En el marco del Día de la Cardiología Peruana, que se conmemora cada 12 de marzo, el especialista recuerda a la población estar alerta y no bajar la guardia a síntomas propios de los males cardiacos; además, destaca la importancia de la prevención y el acceso a tratamientos oportunos mínimamente invasivos. “La atención integral de esta patología debe ser una prioridad para todos los actores que forman parte del sistema de salud. Es prioritario que la población acceda a servicios innovadores que garanticen atención de calidad”, finaliza.