Agencia Andina.- ¿Tiene fotofobia, es decir, sensibilidad a la luz, disminución de la visión, ojo rojo, dolor y migraña? ¡Cuidado! significa que tiene glaucoma avanzado, pues esta enfermedad se presenta sin síntomas, por lo que es recomendable acudir al especialista para realizar un descarte a tiempo.
Gracias al examen clínico ocular oportuno, se estable inmediatamente el control de la presión intraocular, de lo contrario, el nervio óptico que se encarga de mandar la información visual al cerebro, se daña progresivamente.
Al principio la visión no disminuirá, porque lo primero que disminuye es el campo visual periférico y el paciente no se da cuenta de que está perdiendo la vista, pero el daño del nervio óptico es avanzado y no se podrá tratar, explicó el especialista de Oftalmosalud, Juan Carlos Izquierdo.
“Esta enfermedad puede afectar a las personas de cualquier edad, se presente a partir de los 35 años, por lo cual recomendable ir al especialista para realizarse un descarte, pues si bien no tiene cura, sí existen diferentes alternativas de tratamiento según el tipo de glaucoma y el estadio en el que se encuentre”, comentó.
Aclaró que el glaucoma no se desarrolla por leer mucho o con poca luz, consumir un tipo de dieta, usar lentes de contacto u otras actividades cotidianas. Tampoco es contagioso ni es una amenaza para la vida. "Si es detectado a tiempo, no habrá posibilidad de perder la visión”, señaló.
Las personas propensas a padecer glaucoma son aquellas con familiares que sufren dicho mal, tienen miopía, diabetes, usan corticoesteroides de manera prolongada y su presión intraocular es elevada (hipertensos oculares). Ante estos hechos, los mejor es que acudan con frecuencia al especialista.
Tratamiento
Gracias a los avances tecnológicos en oftalmología existen nuevos tratamientos que se ofrecen a los pacientes, como la Trabeculoplastia Láser Selectiva (SLT) que permite efectuar una limpieza no invasiva del sistema del drenaje del ojo y ayuda a bajar la presión de manera fisiológica en pacientes de ángulo abierto, señaló Izquierdo.
“La intervención es ambulatoria, y el paciente pueda retornar a sus actividades al día siguiente. Está dirigido a quienes tienen diagnóstico inicial de glaucoma de ángulo abierto y ofrece la ventaja de estabilizar por varios años la presión intraocular, sin uso de gotas hipotensoras”, precisó.
Mencionó que existen tratamientos quirúrgicos y terapia laser de rápida recuperación, que permiten a los pacientes retomar sus actividades cotidianas