Salud en Casa.- Las vacunas juegan un papel importante en la salud pública. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), su aplicación evita hasta 3 millones de muertes por año, pues tienen como objetivo primordial el control, eliminación y erradicación de las enfermedades prevenibles que antes causaban grandes epidemias, secuelas y muertes.
Gracias a las vacunas, enfermedades como la polio, rubéola, paperas y sarampión han sido controladas, sin embargo, debido a la actual pandemia, a la que se le suma la última alerta epidemiológica por difteria, una enfermedad que reapareció en nuestro país después de 20 años por falta de inmunización oportuna, aún se registran bajos niveles de coberturas de vacunación que exponen a miles de niños y personas vulnerables a enfermedades propensas a brotes, pues al declararse un solo caso en una población vulnerable, es muy fácil que se produzca otros casos, dado que son enfermedades altamente contagiosas y se propagan rápidamente.
“Los padres deben vacunar a sus hijos, para ello deben revisar su carnet de vacunación y confirmar que hayan cumplido con todas sus vacunas. En caso al menor le falta alguna dosis de refuerzo de alguna vacuna debe completarla sin importar el tiempo que haya pasado”, señaló el Dr. Carlos Chávez Lencinas, médico inféctologo.
Por este motivo, considerando que el Ministerio de Salud continuará con su Jornada de Vacunación a nivel nacional en los establecimientos de salud públicos a través de programación de citas, conoce cuáles son las enfermedades más propensas a brotes por falta de vacunación:
VACUNA: La mejor manera de prevenirla es con las vacunas: pentavalente (protege contra la difteria, tos convulsiva, tétanos, hepatitis B y entre otras enfermedades), se aplica a los 2, 4 y 6 de meses de vida. Posterior a ello, está la vacuna triple DTP (protege contra la difteria, tos convulsiva y tétanos) se aplica de forma gratuita a los 18 meses de nacido y la segunda dosis de refuerzo a los 4 años. Gestante también deben vacunarse con la vacuna dpTa que se aplica durante el tercer trimestre de gestación.
VACUNA: La fiebre amarilla puede prevenirse con una vacuna muy eficaz, segura y asequible. Una sola dosis desde los 9 meses es suficiente para conferir inmunidad y protección de por vida, sin necesidad de dosis de refuerzo. Esta vacuna se aplica de forma gratuita a los 15 meses de vida.