Salud en Casa.- La pandemia de la COVID-19 ha causado la sobrecarga de los sistemas globales de salud y ha requerido unir esfuerzos desde diferentes sectores para enfrentar su avance. Además, toda esta situación ha cambiado el concepto de atención sanitaria tal y como lo conocíamos, por lo que también ha puesto en evidencia el aporte que ciertos tratamientos complementarios pueden brindar ante la coyuntura actual.
Al respecto, la Dra. María Fernanda Arboleda, médico anestesióloga y directora internacional de servicios médicos de Khiron Life Sciences Corp, señala que: “existen miles de pacientes en el país que podrían ser beneficiados de los cannabinoides para aliviar sus dolencias. Recordemos que son un excelente coadyuvante para diversas patologías que cuentan con evidencia científica, por ello es importante priorizar su acceso y evitar que las personas recurran al mercado negro para adquirir sus tratamientos durante la emergencia sanitaria”, manifestó.
A su vez, el Dr. Juan Manuel Orjuela, director de Salud Mental de la compañía, también manifestó que cualquier producto o medicamento a base de cannabis debe ser siempre prescrito por un médico entrenado en el uso correcto de la planta, y de esta manera se “garantice la seguridad y eficacia” de las terapias en los pacientes.
A continuación, ambos expertos detallaron algunas de las patologías que actualmente podrían ser beneficiadas por el uso de cannabis:
· Dolor crónico. La evidencia científica ha demostrado que, por ejemplo, el CBD (uno de los componentes principales de la planta), tiene propiedades antiinflamatorias que permiten mejorar los síntomas de dolor crónico oncológico (asociado a la quimioterapia, dolor postoperatorio persistente, etc.) y no oncológico (dolor neuropático por lesión u enfermedad, fibromialgia, entre otras).
· Epilepsia refractaria. Las investigaciones científicas indican que la aplicación de cannabis medicinal, como complemento a la medicación convencional de la epilepsia refractaria, podría reducir hasta en un 75% la frecuencia mensual de convulsiones. El cannabis medicinal, además, mejora el patrón del sueño, y el bienestar de las personas asociado a los síntomas de la epilepsia, por ello es una terapia complementaria que permite mejorar la calidad de vida de los pacientes y les permite retomar sus actividades cotidianas.
· Náusea y vómito inducidos por quimioterapia. El cannabis medicinal permite reducir los síntomas relacionados con los tratamientos oncológicos (ej. náusea y vómito secundario). “Además, en algunos casos, la ausencia de efectos terapéuticos o la presencia de efectos secundarios asociados a medicamentos convencionales permite que el uso del cannabis medicinal sea una alternativa segura el manejo de estos síntomas permitiendo que los pacientes puedan sobrellevar estos tratamientos de una mejor forma”, señaló Arboleda.
· Espasticidad refractaria por esclerosis múltiple. Se trata de un trastorno motor que genera dolor, tensión y rigidez de los músculos, el cual limita la función de caminar, hablar o moverse con normalidad. Gracias al uso de cannabinoides, en aquellos pacientes que no tuvieron éxito con la terapia convencional, fue posible demostrar el alivio de los dolores y otros síntomas.
Del mismo modo, los especialistas destacaron los avances logrados por Khiron, para mejorar el acceso responsable de la planta tras la obtención de la licencia de importación y comercialización de derivados de cannabis.
“Estamos preparando el ingreso muy pronto de los productos a base de cannabis al país, asegurando la garantía y altos estándares que los pacientes necesitan, y con nuestro compromiso de seguir generando educación a la comunidad de médicos para una prescripción responsable y segura”, finalizó Arboleda.