Para combatir el frío no sólo es abrigarse sino tener una buena alimentación

Para combatir el frío no sólo es abrigarse sino tener una buena alimentación

21 Mayo, 2020

Salud en Casa.- Muchas personas en estas bajas temperaturas no saben exactamente qué consumir para reforzar su sistema inmunológico y son más propensos a contraer resfríos e infecciones respiratorias, por ello es necesario mantener una alimentación equilibrada, manifestó la nutricionista del Portal Salud en Casa, Daniela Martinelli Montero

 

 

“Para combatir el frío no sólo es importante abrigarse sino además nuestra ingesta debe adaptarse a las necesidades. En invierno, lo más aconsejable es elegir preparaciones calientes (como las sopas, guisos y verduras al horno, salteadas y cocidas), ayudando así al cuerpo a mantener una temperatura adecuada y además hidratan, ya que tomamos menos agua en invierno. Además debe ser rico en vitaminas A, D y C improtantes para reforzar el sistema inmonológico que nos va a defender de bacterias y virus”.

 

Nuestro consumo debe ser rico en vitamina A (como los alimentos de origen animal o alimentos de color naranja ricos en betacaroteno como la zanahoria y zapallo) y las de hojas verdes (como la espinaca), importante para fortalecer sistema inmune, regenerar los tejidos y las mucosas, sobre todo las mucosas que recubren el interior de los bronquios, contribuyendo a reducir el riesgo de afecciones respiratorias, protege contra infecciones y reduce el riesgo de desarrollar problemas respiratorios.

 

Según la especialista la vitamina C fortalece también el sistema inmune aumenta la resistencia a las infecciones; por ello no debe faltar en nuestra alimentación. Esta se encuentra en las frutas cítricas como el kiwi, limón, mandarina, naranja, que justamente son las frutas de estación: la naturaleza es muy sabia. Y un dato importante: una papa mediana con cáscara también es una fuente rica en vitamina C.

 

 

 

 

 

No olvidar la vitamina D. “Su deficiencia tiene relación con mayores infecciones respiratorias como neumonía. Se encuentra en alimentos como la yema de huevo, lácteos, pescados (bonito, trucha, jurel, anchoveta). Y la luz del sol contribuye también a la síntesis de esta vitamina en el cuerpo. Por más que estén tapados los rayos del sol, estamos recibiendo esa luz necesaria. Exponerse 1 hora al día es suficiente, acercándose a una ventana”, precisó.

 

“Además, incluir en las comidas la cebolla, el ajo, el poro , la curcuma y el kion. Todos ellos son alimentos antiinflamatorios, generan calor, aumentan la circulación sanguínea y son expectorantes previniendo las infecciones respiratorias o ayudando a mejorar los síntomas”, indicó.

 

 

 

Alimentación para niños y adultos mayores

Para Daniela Martinelli, además de incluir una alimentación rica en vitaminas, hay que darle alimentos energético como menestras, quinua, papa, camote, maíz mote y no llenarlos de sopas y caldos. “Si bien los caldos ayudan al organismo a mantener la temperatura corporal adecuada y nos hidratan, en los niños y adultos mayores debemos tener cuidado porque, si sólo los alimentamos de estos, y le damos sobretodo sólo el caldito, los vamos a llevar a la desnutrición porque los llenamos de líquido más no le estamos dando un buen aporte de alimentos energéticos, proteínas y verduras”.

No olvidar un adecuado aporte de proteínas para evitar la pérdida muscular (el adelgazamiento de brazos y piernas es común en el adulto mayor; las proteínas las encontramos en los pescados, el pollo, las menestras y los lácteos”, indicó.

 

Finalmente, y no menos importante, en niños menores de 5 años debemos cumplir con el calendario de vacunación.

 

Recomendaciones finales

No olvidar que debemos mantener un peso saludable para evitar complicaciones. Ya sabemos que el sobrepeso y la obesidad afectan nuestro sistema inmunológico. Realizar ejercicio en casa también contribuye a fortalecer el sistema respiratorio. Siempre mantenernos activos y alejados de la cama que es sólo para dormir o si estamos enfermos.

 

 “No es malo el consumo de chocolate en el invierno, la clave está en no abusar. El chocolate aumenta la producción de serotonina, neurotransmisor responsable de aumentar la felicidad y producir sensación de bienestar pero no por ello debemos abusar en su consumo. Buscar un buen chocolate, mayor a 70% cacao va aumentar la serotonina y tiene antioxidantes”. Y el alcohol. Aunque se cree que el alcohol “nos calienta” en el invierno, es una sustancia que debilita el sistema inmunológico haciendo que nos resfriemos con mayor facilidad y nos deshidrata”, agregó.

 

“Aparte de alimentarte bien, recuerda abrigarte, lavarte las manos a menudo con agua y jabón, y descansar lo suficiente por la noche porque el cuerpo necesita recueperarse y recargarse de energía”, precisó.