Salud en Casa.- Exceder la concentración o cantidades de desinfectantes para prevenir el COVID-19 en el hogar puede ocasionar efectos adversos, desde leves a moderados, dependiendo de la vía de exposición (inhalatoria, ingestión y cutánea), manifiestan científicos del Centro de Investigación en Química, Toxicología y Biotecnología Ambiental (CIQTOBIA) del Departamento Académico de Química de la Facultad de Ciencias - UNALM.
En la siguiente nota, el equipo de científicos del CIQTOBIA advierte sobre las consecuencias del uso incorrecto de los desinfectantes para no caer en la intoxicación. El equipo de expertos en mención, está integrado por: la Ing. Amb. Jacqueline Dioses Morales, Mg. Sc. Paola A. Jorge Montalvo, Mg. Sc. Lena A. Téllez Monzón, PhD. Ing. Amb. Lizardo Visitación Figueroa.
Nunca mezclar. Los investigadores molineros resaltan que no se debe mezclar la lejía (hipoclorito de sodio al 5 %) con limpiadores (sales de amonio cuaternario) debido a que la reacción entre el cloro y el amoniaco forma monocloroaminas y dicloraminas, que son irritantes respiratorios efectivos (WHO 2000).
Las cloroaminas pueden provocar dificultad para respirar y dolor en el pecho (EMR-ISAC 2020). La cloramina inhalada reacciona con la humedad en las membranas mucosas del tracto respiratorio para liberar amoníaco, ácido clorhídrico y radical libre que producen irritación aguda en las vías respiratorias. En altas concentraciones, pueden ocasionar efectos corrosivos resultando en lesiones celulares como neumonitis y edema (Slaughter et al. 2019).
Además, no se debe mezclar agua oxigenada (peróxido de hidrógeno al 10 %) con vinagre (ácido acético al 5 %), la reacción de ambos genera ácido peracético (también conocido como ácido peroxiacético) que es altamente corrosivo (EMR-ISAC 2020), por lo que su uso requiere de guantes y mascarilla.
La mezcla de lejía (hipoclorito de sodio) con vinagre (ácido acético al 5 %) genera cloro gaseoso, esto puede provocar tos, problemas respiratorios, ardor y ojos llorosos. A su vez el cloro gaseoso generado reacciona con el agua formando ácido clorhídrico, hipocloroso (EMR-ISAC 2020) y radical oxígeno. Estos productos pueden romper proteínas celulares y causar daño citotóxico a las células del tracto respiratorio (Slaughter et al. 2019).
EXCESO DE CANTIDADES
Exceder la concentración o cantidades de los desinfectantes puede ocasionar efectos adversos desde leves a moderados, según las siguientes vías:
QUÉ HACER SI NOS INTOXICAMOS
La ingestión accidental de lejía doméstica no suele tener importancia clínica. Sin embargo, aquellos que ingieren una gran cantidad de una formulación diluida o una preparación de alta concentración puede desarrollar lesiones corrosivas graves y raramente mortales, por lo que es esencial contar con una atención médica de inmediato, la atención estará dirigida en relación a los síntomas del paciente (Slaughter et al. 2019).
Cuando hay exposición a la piel, se debe enjuagar con abundante agua por al menos 20 minutos, evite esparcir el producto químico en piel no afectada, las quemaduras con lejías se deben tratar como si fuera una quemadura térmica (Luttrell 2001, Slaughter et al. 2019).
Exposición ocular, se debe echar abundante agua, retirar lentes de contacto antes del enrojecimiento. Se requiere que visite al oftalmólogo para un diagnostico especializado (Slaughter et al. 2019).
Vías respiratorias, mueva a la víctima al aire fresco y llame a atención médica
de emergencia, debe estar atento a las señales de insuficiencia respiratoria para proporcionar asistencia de ventilación con oxígeno si es necesario (Luttrell 2001).
RECOMENDACIONES ANTES DE INICIAR LA DESINFECCIÓN
El equipo científico de CIQTOBIA de la UNALM recomienda lo siguiente:
PLAN DE DESINFECCIÓN EN EL HOGAR
Se recomienda elaborar en el hogar un plan de limpieza y desinfección, implementarlo, mantenerlo y revisarlo. Para lo cual debe considerar lo siguiente: