Salud en Casa.- Comienza la temporada de verano y miles de padres de familia aprovechan estos meses para inscribir a sus hijos en diferentes disciplinas que, además de permitirles disfrutar de las vacaciones, los mantendrán activos. Para el Dr. Carlos del Águila, médico endocrinólogo pediatra, estas actividades ayudarán a que el niño(a) tenga un crecimiento saludable, ya que, fomentan el incremento de la producción de hormona de crecimiento.
El especialista indica que, según cifras del Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN) de Breña, en el 2019 se recibieron en nuestro país aproximadamente 1100 casos de pacientes con talla baja o retardo del crecimiento procedente de las diferentes regiones del país. “Si bien las causas son diversas, entre las principales se encuentran problemas nutricionales, el bajo peso al nacer y deficiencia de hormona de crecimiento. Además, debemos considerar el potencial genético de cada niño que, en condiciones ambientales adecuadas, logran una mejor talla final”, agrega.
Para favorecer el desarrollo de los pequeños durante el verano, el Dr. del Águila, a continuación, detalla las principales acciones que pueden tomar en cuenta los padres:
Mantener una alimentación balanceada. Se deben adaptar las comidas a una época en la que las necesidades de los niños son muy diferentes a las de los meses escolares, debido al cambio de rutina. Por este motivo, es importante mantener una dieta balanceada alta en proteínas (carne, pescado, huevo y leche), verduras y frutas ricas en vitamina C. Además, fomentar hábitos de alimentación saludables, como el consumo de agua, y establecer un horario para las tres comidas principales del día. Todo esto ayudará a fortalecer el sistema inmunitario y aportará al crecimiento del menor.
Fomentar la práctica de deportes. Sin importar la época del año, la actividad física es un componente esencial de un estilo de vida saludable. Actividades como natación, ciclismo, baloncesto, voleibol son algunas de las disciplinas recomendadas en esta temporada. Además, para evitar el sedentarismo, se sugiere reducir el número de horas frente al celular o la computadora.
Garantizar el cumplimiento de las horas mínimas de sueño. Dormir diariamente entre 8 a 10 horas, según la edad, de manera ininterrumpida, contribuye a asegurar un buen crecimiento y desarrollo. Por este motivo, lo recomendable es que, a pesar de los posibles cambios de horario, los niños duerman las horas adecuadas de manera continua pues, durante el sueño profundo se incrementa la secreción de la hormona de crecimiento.
Por otro lado, señala el especialista que, si bien las acciones antes mencionadas pueden favorecer el incremento de talla en los niños, es importante visitar regularmente al pediatra y asegurarse de que el crecimiento vaya acorde con lo esperado. Caso contrario, debe remitirlo con el endocrinólogo pediatra que indicará la terapia adecuada en función al peso y características del paciente.
El Dr. del Águila explica que el diagnóstico y el tratamiento temprano pueden ayudar a que un niño se desarrolle a un ritmo adecuado, principalmente si se trata de una deficiencia hormonal como la de hormona de crecimiento. “Actualmente, para este tipo de pacientes, se recomienda prescribir un tratamiento con hormona de crecimiento recombinante, el cual se suele administrar a través de inyecciones diarias durante varios años bajo monitoreo del especialista”, indica.