Salud en Casa.- La primavera se asoma con la llegada de los primeros rayos de sol durante horas de la tarde. Esto trae como consecuencia el aumento de casos de enfermedades respiratorias en la población, pues las personas empiezan a usar ropa más ligera y no están preparadas para pasar de ambientes con temperaturas elevadas a espacios fríos, o viceversa.
Algunas de las patologías que pueden aumentar su incidencia en niños y adultos durante esta época son la tos ferina y la influenza. La primera, más conocida como la tos de los cien días, ha infectado, al menos, a 640 personas en el país en lo que va del año, 10 de los cuales han fallecido
Las personas con mayor riesgo de contraer influenza son los niños menores de 5 años y mayores de 60. Si bien para los adultos puede ser un cuadro muy leve, la infección es especialmente riesgosa para los niños pequeños. En menores de 3 meses, uno de los síntomas más graves es que la infección limite el paso del aire hacia los pulmones e impida, en consecuencia, que se alimentan correctamente. En el caso de los mayores de 4 meses, el cuadro clínico dura al menos dos semanas, y pueden presentarse síntomas como ataques de tos, silbido en el pecho o vómito.
Con relación a la influenza, de acuerdo con el Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades (CDC Perú) del Ministerio de Salud (Minsa), hasta la fecha se han presentado más de 46 casos de personas contagiadas.
A pesar de que muchas personas creen que es una condición propia del invierno, Raúl Urquizo, decano del Colegio Médico de Lima, explica que durante la primavera el virus se mantiene circulando y, si no se tiene cuidado, pueden llegar a aumentar la cantidad de casos. “Todos debemos protegernos contra la influenza, pues esta enfermedad ataca a personas de cualquier edad y afecta de seriamente nuestra vida y sociedad”, añade.
Además del cambio de estación, existen otras causas de estas enfermedades, tales como la falta de vacunas, la contaminación en las casas, la falta de ventilación, o el contacto con personas enfermas. El Dr. Urquizo explica que pasar de un ambiente a otro puede suponer una diferencia de hasta seis grados, lo que genera un cambio brusco en la temperatura del aire que ingresa a los pulmones y aumenta el riesgo de contagio.
De acuerdo con el especialista, las personas que contraen esta enfermedad se pueden recuperar en un promedio de dos semanas. Sin embargo, otras pueden presentar complicaciones como neumonía. Este riesgo es 100 veces mayor en personas con influenza, infección que en casos severos puede llevar a la muerte del paciente. Se debe tener en cuenta que el virus muta año con año.
Para prevenir ambas infecciones, el especialista recomienda:
· Tanto niños como adultos tener sus vacunas para ambas enfermedades actualizadas.
· Ventilar a diario las habitaciones al menos diez minutos al día.
· Evitar cambios bruscos de temperatura.
· Incluir frutas y verduras en nuestra dieta diaria.
· Cubrir boca y nariz al salir a la calle o a espacios libres.
· Evitar sitios cerrados demasiado concurridos.
Ante los primeros síntomas de cualquiera de estas enfermedades, el Decano del Colegio Médico de Lima recomienda asistir de inmediato al centro de salud para poder recibir tratamiento oportuno, ya que una enfermedad considerada común puede llegar a representar un gran riesgo para la persona.