Salud en Casa.- Más de 27 millones de soles ha transferido este año el SIS, a través del Fondo Intangible Solidario de Salud (FISSAL), a los establecimientos de salud públicos a nivel nacional, para garantizar la cobertura financiera de los asegurados que padecen de insuficiencia renal crónica (IRC).
La entrega adelantada de esta partida presupuestaria se hizo con la intención de que los hospitales puedan adquirir con tiempo medicinas e insumos médicos, y sufragar los gastos que demande la atención de los pacientes con este mal. La cobertura comprende el diagnóstico oportuno y tratamiento con hemodiálisis, diálisis peritoneal y trasplante renal, que incluye terapia post trasplante o lo indicado por los médicos tratantes.
24 trasplantes financiados
Precisamente, de diciembre del 2017 a la fecha, FISSAL ha financiado el trasplante renal de 24 afiliados al SIS, tanto niños como adultos, quienes ahora están gozando de buena salud y han vuelto a llevar una vida normal.
Cabe anotar que FISSAL sufraga el trasplante renal de los asegurados cuya prescripción médica así lo indique y, además, cuenten con donante apto.
Actualmente, el Instituto Nacional de Salud del Niño San Borja y los hospitales Cayetano Heredia y Arzobispo Loayza están acreditados como establecimiento donador-trasplantador de riñón y mantienen convenio con FISSAL para brindar la atención de trasplante renal a los asegurados SIS.
Hemodiálisis en centros particulares
Para atender la gran demanda de hemodiálisis, FISSAL ha contratado el servicio de atención ambulatoria en 59 centros particulares a nivel nacional. De este modo se cubre la falta de oferta que se produce en algunos establecimientos públicos, de tal manera que los afiliados reciban la hemodiálisis de manera oportuna, eficiente y con la debida calidad.
De otro lado, se ha aprobado el Plan de Financiamiento para Fortalecer la Diálisis Peritoneal, procedimiento que se realiza a través de una membrana del abdomen del paciente y puede practicarse en casa. La Diálisis Peritoneal se ha constituido en una opción válida para el tratamiento de la insuficiencia renal, pues mejora la calidad de vida del paciente, le evita el traslado hacia un establecimiento de salud y no requiere de la presencia de personal de salud.